El trigo terminó la semana con alzas en torno del 10% en Chicago y del 11% en Kansas

Tras deambular varios meses con un nivel de precios de los más bajos en casi cuatro años, el trigo tuvo su semana de redención en el mercado estadounidense, donde el balance de las operaciones dejó alzas en torno del 10% en Chicago y del 11% en Kansas, las dos plazas que todavía sirven de referencia para los precios internacionales del grano fino. Esta mejora, que tuvo como puntapié inicial los conflictos bélicos en Medio Oriente y en la zona del Mar Negro, sumó fundamentos y mantuvo a los fondos de inversión del lado comprador en las cinco ruedas de negocios.

Al cierre del segmento comercial, la posición mayo del trigo en Chicago y en Kansas subió hoy US$0,36 y 5,23, al pasar de 221,27 a 221,63 y de 232,20 a 237,43 dólares por tonelada. En el balance semanal este contrato aumentó un 9,6 y un 11,1% en la comparación con los 202,16 y con los 213,64 dólares del viernes anterior, respectivamente. Este nivel de precios se ubicó como el más alto desde inicios de febrero.

De los factores que posibilitaron la tónica alcista se destacó el déficit hídrico que afecta zonas productoras de trigo en Estados Unidos. El foco está puesto sobre Kansas, el principal estado proveedor de las variedades de invierno, que normalmente son las que aportan poco más del 70% de la oferta total del cereal estadounidense. Allí, según el último mapa semanal que monitorea la sequía, la superficie bajo condiciones de sequía moderada creció del 53,11 al 65,42%, en tanto que el área con sequía severa se extendió del 6,98 al 17,01% del territorio.

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Esto llevó ayer al Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) a elevar del 26 al 30% la proporción de suelos cubiertos con trigos de invierno que experimenta algún nivel de sequía en el nivel país, un dato que se mantuvo por debajo del 51% de igual momento de 2023.

La presunción de los operadores es que esta persistente falta de humedad en zonas donde los cultivos están en plena espigazón puede acentuar la desmejora en la condición de las plantas que se evidenció en las últimas semanas. Cabe recordar que el lunes el USDA redujo del 55 al 50% la proporción de trigos de invierno en estado bueno/excelente y la dejó por debajo del 54% previsto por los operadores. En el caso particular de Kansas, el organismo ajustó por tercera semana consecutiva la calificación óptima para las plantas, esta vez, del 43 al 36%.

El fin de semana los operadores seguirán activos, luego de que hoy el Servicio Meteorológico Nacional en EE.UU. pronosticó para mañana la posibilidad de tormentas severas del centro al sur de las grandes planicies, donde “será posible la caída de granizo muy grande, vientos dañinos y múltiples tornados fuertes”.

El mayor impacto alcista de las vicisitudes de los cultivos se refleja sobre el mercado de Kansas, dado que es allí donde se comercializa el grueso de los trigos de invierno, mientras que Chicago concentra las operaciones con el grano de primavera, que está en plena siembra –el lunes el USDA relevó su progreso sobre el 15% del área prevista– y que también comienza a demandar más humedad en el norte de las grandes planicies, con epicentro en Dakota del Norte, que es el principal Estado productor de esta variedad.

Influencia rusa

Pese a no tener una Bolsa que sirva de referencia mundial para los precios, Rusia ejerce esa posición de liderazgo por el peso específico en la producción de trigo, donde ocupa el tercer lugar del podio detrás de China y de la India, y en exportaciones, donde ya está consolidado como el principal proveedor y a mucha distancia del resto de los oferentes, en un mercado mucho más atomizado que los de maíz y soja.

Y en estos momentos los campos del sur de Rusia están padeciendo por la falta de humedad que ya afecta el estado de los cultivos. La región de Rostov, que es la principal productora de trigo, casi no recibió lluvias en los últimos dos meses. De los 92/94 millones de toneladas proyectados pocas semanas atrás, ahora los privados especulan con una cosecha 2024/2025 en torno de los 85 millones de toneladas, dependiendo del retorno de las lluvias en forma urgente. La cosecha en este país comienza entre mediados y fines de junio.

La preocupación por la situación de los cultivos en Rusia amortiguó la presión bajista que ejerce el buen ritmo de exportaciones rusas de trigo que, según la consultora SovEcon, alcanzarían un récord histórico en abril, con 4,60 millones de toneladas, frente a los 4,40 millones de igual mes de 2023 y a los 2,90 millones de toneladas promedio para el cuarto mes del año.

A lo antedicho se agregan otros factores que influyen en modo alcista. Entre ellos, uno de los que dio origen al actual rally alcista, los ataques rusos sobre infraestructura exportadora de Ucrania, que se acentuaron durante las últimas semanas y que comienza a ralentizar sus despachos. Esos ataques no se limitan a los puertos sobre el Mar Negro y sobre el río Danubio, sino que incluyen las vías férreas que abastecen de granos a esas terminales.

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Yuri Vaskov, viceministro de Comunidades, Territorios y Desarrollo de Infraestructura de Ucrania, informó que más de 210 instalaciones de infraestructura portuaria ucranianas fueron total o parcialmente destruidas como resultado de los ataques rusos en lo que va de la guerra. “Sin embargo, el gobierno continúa apoyando y restableciendo todas las formas posibles para darle continuidad a las exportaciones de Ucrania. Tanto el gobierno como las empresas privadas están haciendo esfuerzos para tener tantas rutas alternativas como sea posible”, agregó.

La previsión de una menor oferta de trigo en la Unión Europea durante la campaña 2024/2025 por una retracción en las siembras como consecuencia de lluvias excesivas en varios de los principales países productores también apuntaló los precios internacionales. Ayer la Comisión Europea recortó su pronóstico inicial para la cosecha de trigo blando del bloque de 120,80 a 120,20 millones de toneladas y ubicó el volumen en el nivel más bajo en cuatro años. En Francia, que es el principal productor del grano fino del bloque, FranceAgriMer redujo en su reporte semanal del 64 al 63% la proporción de trigo blando en estado bueno/muy bueno y lo mantuvo lejos del 94% de igual momento de 2023.

Subas en el mercado local

La firmeza de los precios del trigo en Estados Unidos tuvo su correlato en la Argentina y más específicamente, en el Matba Rofex. En efecto, hoy las posiciones mayo y julio del grano fino sumaron US$2,10 y 0,90, al terminar la rueda con ajustes de 232,10 y de 234,50 dólares por tonelada. En el balance semanal estos contratos ganaron un 6,7 y un 5,4% en la comparación con los 217,50 y con los 222,50 dólares vigentes el viernes anterior.

En momentos en los que se definen los planes de siembra 2024/2025, las mejoras también incluyeron al trigo nuevo en la plaza de futuros agrícolas, donde hoy las posiciones diciembre y enero subieron US$1,80 y 2, al finalizar la jornada con valores de 222 y de 224,50 dólares por tonelada. Para estos contratos el balance de la semana dejó mejoras del 7,5 y del 7,6% frente a los 206,50 y a los 208,60 dólares del cierre del segmento anterior.

En la plaza física los exportadores volvieron a proponer hoy 200.000 pesos por tonelada para el trigo con entrega en las terminales del Gran Rosario; 190.000 pesos para Bahía Blanca, y 165.000 pesos para Necochea. Estos valores quedaron por encima de los vigentes el viernes pasado, de 190.000, 185.000 y de 160.000 pesos por tonelada, respectivamente.