Blinken celebra reuniones de alto nivel en Israel mientras aumenta la presión sobre Hamas para que acepte el acuerdo de alto el fuego

(CNN) — El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, se prepara para una nueva ronda de conversaciones de alto nivel en Israel este miércoles, en la que Estados Unidos pretende aumentar la presión sobre Hamas para que acepte un alto el fuego y un acuerdo de liberación de rehenes, al tiempo que intenta evitar una ofensiva militar israelí en Rafah y seguir abordando la crisis humanitaria en Gaza.

El máximo representante de la diplomacia estadounidense llegó a Tel Aviv este martes, tras hacer escala en Arabia Saudita y Jordania, como colofón de su séptima ronda de contactos diplomáticos en la región desde el ataque de Hamas del 7 de octubre. Está previsto que se reúna con altos cargos del gobierno israelí, incluido el primer ministro Benjamin Netanyahu.

Funcionarios estadounidenses mostraron cierto optimismo sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo que garantice un alto el fuego y la liberación de los rehenes en manos de Hamas, después de que Israel presentara lo que Blinken describió este lunes como una propuesta «extraordinariamente generosa».

Blinken reiteró este martes que cree que un acuerdo es «alcanzable porque los israelíes pusieron una propuesta sólida sobre la mesa» y que EE.UU. desea que dicho acuerdo se concrete «en los próximos días».

Israel «demostró que está dispuesto a comprometerse, y ahora le toca a Hamas», dijo. «No más retrasos. No más excusas. El momento de actuar es ahora».

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Blinken afirmó que el acuerdo propuesto «es la mejor manera, la más eficaz, de abordar realmente el sufrimiento de la gente y también de crear un entorno en el que podamos, con suerte, avanzar hacia algo que sea realmente sostenible».

Sin embargo, no está garantizado que se llegue a un acuerdo. Negociadores de Egipto, Qatar, Estados Unidos y Hamas se han reunido en El Cairo mientras estos últimos estudian un nuevo marco propuesto por Egipto que pide al grupo que libere hasta 33 rehenes secuestrados en Israel a cambio de una pausa en las hostilidades en Gaza, según dijeron a CNN una fuente israelí familiarizada con las negociaciones y una fuente diplomática extranjera. Israel ayudó a elaborar la propuesta, pero no la ha aceptado plenamente, según las fuentes. Israel está esperando una respuesta de Hamas antes de decidir si envía su propia delegación a El Cairo.

Mientras Estados Unidos trata de conseguir un acuerdo que, según afirma, mejorará la situación a largo plazo en Gaza, Blinken presionará a las autoridades israelíes para que hagan más a corto plazo para hacer frente a la catástrofe humanitaria en el enclave costero.

La visita de Blinken es la última que realiza desde el mortífero ataque israelí contra un convoy de ayuda de World Central Kitchen en Gaza a principios de abril. Este ataque, cuya autoría fue reivindicada por las Fuerzas de Defensa de Israel, provocó una gran indignación y los llamamientos más enérgicos del gobierno de Biden para que Israel proteja a los civiles y adopte más medidas para hacer frente a la situación humanitaria en la franja devastada por la guerra.

«Si no vemos los cambios que necesitamos ver, habrá cambios en nuestra propia política», advirtió Blinken en una conferencia de prensa el mes pasado.

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Aunque Israel se había comprometido a introducir cambios —abrir nuevos cruces, permitir la entrada de más camiones en Gaza, crear un mecanismo de distención—, ha tardado en instituirlos. El gobierno de Biden también se ha enfrentado a las críticas de los responsables de la ayuda, que afirman que están preocupados por contar los camiones, en lugar de abordar la crisis en su conjunto.

Blinken declaró este martes que por fin se estaba enviando a Gaza un primer tramo de ayuda procedente de Jordania a través del paso fronterizo de Erez, entre Israel y el norte de Gaza, pero que «aún queda mucho por hacer y, en particular, tenemos que asegurarnos de que nuestra atención no se centra sólo en las aportaciones, sino en el impacto».

El alto diplomático estadounidense afirmó que es «de vital importancia que haya una lista clara y afirmativa de productos necesarios para el bienestar de la población de Gaza… y que no se denieguen arbitrariamente productos que necesitan entrar en Gaza».

También se espera que Blinken se haga eco de las repetidas advertencias del gobierno de Biden contra una ofensiva militar a gran escala en Rafah, adonde han huido más de un millón de palestinos.

«Todavía no hemos visto un plan que nos dé confianza en que se pueda proteger eficazmente a los civiles», dijo Blinken este lunes. El mes pasado, puso en duda la idea de que tal plan pudiera siquiera desarrollarse.

«Inevitablemente va a quedar una población civil bastante significativa en Rafah, y creemos que una operación militar de envergadura con una gran presencia de población civil tendría consecuencias terribles para esa población», declaró el 20 de abril.

Este martes, Netanyahu volvió a amenazar con llevar a cabo una ofensiva «con o sin acuerdo». A pesar de la amenaza, funcionarios estadounidenses dijeron que no creen que una ofensiva sea inminente.

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